Dispositivos electrónicos. Raúl de la Rosa por Vivo Sano

1) ¿Qué efectos perjudiciales para la salud consideras que tiene el hecho de pasarnos tantas horas frente a las diversas pantallas (ordenador, tele, móvil, tabletas), a nivel de las ondas, ocular, cutáneo, postural, psicológico, relacional, etc.?

El uso durante varias horas al día de ordenadores, tabletas, televisores o móviles es un factor de riesgo para la salud que tiene distintas vertientes.

Hace ya muchos años que sabemos que pasar varias horas al día frente a una pantalla se traduce en una reducción de la capacidad de autocontrol y de la paciencia. Esto es especialmente llamativo en el caso de los niños, cuya capacidad de atención se ve notablemente mermada, lo que conlleva una mayor probabilidad de fracaso escolar, dependencia psicológica de los dispositivos inalámbricos y un aislamiento social y de la realidad.

Asimismo, las radiaciones que generan los móviles y otros dispositivos inalámbricos, según multitud de estudios y llamamientos científicos, son causa de distintos tipos de cáncer y de otras muchas patologías. Hace años que buena parte de la comunidad científica viene avisando de los riesgos sanitarios de la exposición a las microondas de estos dispositivos, a lo que hay que añadir los ojos cansados e irritados al estar cotidianamente frente a las pantallas de televisión, ordenadores, tabletas o teléfonos móviles. Para aliviar este problema, especialmente es conveniente hacer parpadear frecuentemente y hacer descansos cada 20-30 minutos y dejar de mirar la pantalla durante unos treinta segundos y, preferentemente, dirigiremos la vista a distancias más largas cambiando el enfoque varias veces: distancia corta, media y larga. En el caso del ordenador, la pantalla debería estar a la altura de los ojos, y en todas las pantallas es mejor no estar a menos de 60 centímetros de distancia y evitar mirar pantallas pequeñas, especialmente para leer, durante largo tiempo.

Asimismo, cada hora conviene hacer un breve descanso, levantarnos y andar unos pasos para eliminar o reducir los dolores de cabeza, la visión borrosa, la sequedad y la tensión ocular, y también la postural, así como hacer estiramientos.

De esta forma aliviaremos el sedentarismo ante los estímulos de las pantallas, que causa graves problemas de salud, entre ellos el sobrepeso, especialmente entre los niños.

2) ¿Qué beneficios crees que hay en “hacer limpieza” regularmente de las pantallas, y reducirlas a lo estrictamente necesario?

De la misma forma en que hacer periódicamente un ayuno de comida puede ser un buen aliado para nuestra salud, el “ayuno” del uso de aparatos electrónicos es una forma de terapia de desintoxicación de los campos electromagnéticos que generan y de su dependencia psicológica: angustia por no estar permanentemente conectado, pendiente constantemente de posibles llamadas, dependencia de los teléfonos móviles ante la falsa necesidad de estar siempre conectado y disponible.

Y, por supuesto, evitar dormir con el teléfono móvil cerca de la cama o, incluso, debajo de la almohada para evitar las radiaciones y permitir que la mente descanse al no estar inconscientemente pendiente de una llamada o mensaje entrante.

Al menos durante la noche deberíamos hacer un “ayuno” de radiaciones y de estímulos cerebrales y desconectarnos absolutamente de los dispositivos electrónicos.

3) ¿Qué hábitos te parecen saludables a la hora de estar frente a las pantallas (distancia, tiempo, postura, respirar, etc.)?

Para evitar o paliar problemas en la muñeca y dedos por el uso de ratones, teclados…, es importante que los hombros estén relajados y que no estén agarrotados y encogidos. Es importante regular la altura de la silla con respecto a la pantalla para evitar arquear la columna vertebral y posibles daños y dolores lumbares, dorsales y cervicales. Y, al menos, un minuto de meditación cada hora realizando una práctica de la mente serena, dejando a la atención descansar sobre la respiración. Una sola respiración lenta y profunda mientras estamos usando cualquier dispositivo, permite que nuestro cuerpo se relaje y nuestra mente se serene.

Raúl de la Rosa

Fundación Vivo Sano