CÁNCER DE MAMA Y CEM

Revisión de conjunto Número de Julio-Agosto-1994

Exposición ocupacional a campos electromagnéticos y riesgo de cáncer de mama en varones

5. Talamante Serrulla, C. Saiz Sánchez y A. Calatayud Sarthou. Área de Medicina Preventiva y Salud Pública. Departamento de Medicina Preventiva y Salud Pública. Bromatología. Toxicología y Medicina Legal. Facultad de Medicina. Universidad de Valencia

RESUMEN
Teniendo en cuenta que se ha sospechado reciente-mente una asociación entre exposición a campos electromagnéticos (C.E.M> y cáncer de mama masculino, especialmente por razones ocupacionales, se analizan las características propias del cáncer de mama masculino, poco frecuente en relación con el femenino, y se indican los datos disponibles en España en cuanto a mortalidad por esta neoplasia. Asimismo, se analizan los posibles mecanismos patogénicos de esta asociación y, finalmente, se describen los estudios epidemiológicos más recientes respecto a este problema.

INTRODUCCIÓN
Las posibles repercusiones en Salud Pública de la exposición a campos electromagnéticos (C.E.M.> de muy baja frecuencia (50-60 Hz.), especialmente por motivos ocupacionales, pero también por circunstancias de residencia, ha despertado un gran interés en los últimos anos.
Wertheim y Leeper, en 1979, fueron los primeros en sugerir una asociación entre C.E.M. y cáncer. En general, se ha valorado especialmente la posible asociación con cánceres infantiles (sobre todo, leucemias y neuroblastoma>, y posiblemente con cánceres en el adulto (¿leucemia mielógena?, ¿cáncer de testículo?, ¿tumores del S.N.C.?>. y también con la evolución anormal de embarazos (abortos) y malformaciones congénitas.
Recientemente se ha descrito una posible asociación entre la exposición ocupacional a C.E.M. en numerosas profesiones y un aumento del riesgo de cáncer de mama en varones (1-41).

CARACTERíSTICAS DEL CANCER DE MAMA MASCULINO
A excepción de poblaciones negras, tanto americanas como africanas, el cáncer de mama masculino es poco frecuente, apenas el 1 % de los tumores malignos del varón, y en E.E.U.U. se ha descrito una incidencia anual ajustada por edades de 11100.000 varones, aunque su pronóstico se considera generalmente peor que el del sexo femenino. Además, se ha observado que la incidencia es mayor en los paises occidentales, en tanto que alcanza valores mínimos en zonas asiáticas. En conjunto, la distribución del cáncer de mama masculino reproduce la del cáncer de mama femenino, por lo que se puede suponer que la influencia de factores endógenos o procedentes del medio ambiente puede ser similar, y se ha demostrado también asociación familiar en el cáncer de mama masculino, tal como sucede en el femenino.
Es muy posible que el papel de los estrógenos en el cáncer de mama masculino sea similar al del f~ menino; tanto la acción de fármacos que aumentan la tasa de estrógenos o de prolactina, como la alteración endocrina por orquidectomía, así como la presunta asociación con el Síndrome de Klinefelter, mastopatía benigna, historia de orquitis y, sobre todo, con la ginecomastia, apoyan este papel patogénico fundamental. Menor asociación parece existir con la obesidad y con factores alimentarios (esencialmente, el consumo de grasas) o la asociación con otros cánceres hormono-dependientes, como el cáncer de próstata o de testículo. Se ha destacado que el cáncer de mama masculino representa un modelo de alteración neoplásica de tejido mamario no influenciado por los factores hormonales femeninos.
El cáncer de mama es histológicamente similar en varones y mujeres y juegan algunos factores comunes, como la historia familiar y la exposición a radiaciones ionizantes. Aunque se puede sugerir que sea la misma enfermedad en varones y mujeres, quizá un efecto directo de los C.E.M. sobre la proliferación celular pueda actuar en ambos sexos, en tanto que los mecanismos ligados a factores hormonales pueden ser diferentes en uno y otro sexo, por lo que se requieren más estudios en este sentido (42-49).
 
DATOS REFERENTES A ESPAÑA
Hemos obtenido los datos de mortalidad por cáncer de mama, tanto en varones como en mujeres, de los «Movimientos naturales de la población española. Tomo III. Defunciones según la causa de muerte», publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE>. A partir de estos datos se han calculado las tasas de mortalidad por 1.000.000 de habitantes, tanto en varones como en mujeres, para el periodo estudiado (1968-1986).
En el estudio de Moolgaukar, 5. H. y col. (47) se comparaban los datos de mortalidad por cáncer de mama masculino en U.S.A. y Japón, teniendo en cuenta que la mortalidad por cáncer de mama en mujeres es menor en Japón que en U.S.A., y se observa una paralela diferencia en la mortalidad de varones por esta causa, demostrando que el logaritmo de la tasa de mortalidad en ambos paises aumentaba riesgo?
A pesar de estas dificultades, la investigación continúa. Nuevos estudios han abordado a gran escala la aparición de casos de leucemia en Estados Unidos, Canadá y Reino Unido asociados a la exposición de campos magnéticos.

LA CUESTIÓN DEL ABORTO
Se ha investigado también la conexión existente entre abortos de tipo natural y la exposición a campos magnéticos. Esta vinculación se sugirió por primera vez a finales de 1970, cuando se registró en Estados Unidos y Canadá un número significativo de abortos espontáneos y de malformaciones en recién nacidos en madres que trabajaban con pantallas de monitor de TV. La investigación se produjo
inicialmente en California como consecuencia de una fuga de pesticida. Se intentaba contabilizar el número de mujeres embarazadas que podían haber sufrido las consecuencias de la fuga en términos de abortos, malformaciones en el feto, etc… Curiosamente no se encontró una relación directa con la fuga del pesticida, pero la investigación reveló que había un incremento del 73% en la aparición de abortos espontáneos en las mujeres que utilizaban pantallas de TV alrededor de 20 horas por semana durante el primer trimestre de embarazo. Se encpntró un aumento de malformaciones congénitas, pero no era estadísticamente significativo.
Sin embargo, en el terreno de las pantallas de ordenador no se encontró la correlación anterior. Así, en 1991, el Instituto de Segnridad e Higiene en el Trabajo de Atlanta, Georgia, publicó un estudio comparando los efectos de los campos magnéticos en operadoras telefónicas embarazadas que utilizaban monitores de rayos catódicos con otras que utilizaban otro tipo de displays como LEDS, etc.
El estudio no encontró relación entre abortos espontáneos y número de horas trabajadas en el terminal de ordenador. Un análisis posterior mostró que en ambos casos la exposición media a un cierto tipo de campo electromagnético de baja frecuencia era el mismo en ambos casos.
El trabajo más significativo sobre video- displays que eliminaba el problema de discernir grupos de referencia y de riesgo, fue publicado en 1992 en Helsinki por el Instituto de Segnridad e Higiene en el Trabajo de Finlandia. En aquel estudio se comparaban exposiciones ante campos magnéticos producidos por terminales de video, observándose que las mujeres embarazadas expuestas a campos de 0.3 microteslas tenían un riesgo 3 veces mayor de sufrir abortos espontáneos que otras expuestas a 0.1 microteslas. Aquellas que estaban expuestas a campos entre 0.2 y 0.3 microteslas tenían un riesgo doble de aborto espontáneo. En este caso la duración de la exposición no tenía un efecto añadido importante.

ESTUDIOS SOBRE RIESGO LABORAL
Los epidemiólogos han buscado también respuestas a los efectos de los campos
linealmente con el logaritmo de la edad, y compro-bando que, de este modo, las curvas de mortalidad específicas por edades del cáncer de mama masculino se asemejan a numerosos tumores epiteliales y no a las típicas del cáncer de mama femenino.
En cuanto a la incidencia (38). como se observa en la figura 4, España ocupa un lugar relativamente bajo, siendo Israel el país que tiene las tasas más elevadas de incidencia (poblaciones judías de Israel nacidas en Europa y América. siendo poco más de la mitad de esa tasa para los nacidos en Israel>.
Habiendo sugerido Brunet, M. y cols. (50> una distribución bimodal de las edades en el cáncer de mama masculino, aunque no se ha comprobado con evidencia.
 
POSIBLES MECANISMOS DE ACTUACION DE LOS C.E.M. EN LA CARCINOGENESIS
Se ha demostrado recientemente la capacidad que tienen los C.E.M. de disminuir el nivel de melatonina circulante, tanto en animales como en el hombre. Y Stevens R.G. ha propuesto que éste sería el mecanismo por el que podrían influir en el cáncer, ya que ello daría lugar a un aumento de estrógenos y prolactina, que favorecería la «promoción maligna celular». En base a estos datos, se ha investigado la posibilidad de un exceso de casos de cánceres hormon~dependientes (cáncer de mama, próstata o melanoma de piel) en poblaciones expuestas a C.E.M. básicamente por razones ocupacionales.
Asimismo, Stevens, R. G. ha sugerido que personas expuestas a C.E.M. pueden tener un riesgo aumentado de cáncer de mama, bien porque la inhibición de melatonina puede dar lugar a una producción aumentada de prolactina y de estrógenos ováricos o por un efecto directo inhibidor. de la melatonina sobre la proliferación celular en el cáncer de mama
 
ESTUDIOS EPIDEMIOLOGICOS RECIENTES
El primer autor que advirtió una relación entre C.E.M. y cáncer de mama fue Stevens, R. G., en 1987. A partir de esta fecha, se han multiplicado los estudios respecto a ese problema (54-65).
Matanoskí y cols. (21> han comunicado un aumento de riesgo de cáncer de mama en empleados de instalaciones telefónicas. Y se ha descrito también en Noruega en trabajadores expuestos (industrias eléctricas> un exceso de riesgo para esta localización de cáncer.
En cuanto al cáncer de mama en mujeres y C.E.M. se han realizado dos estudios de exposición residencial a C.E.M. Wertheimer y Leeper (22), en Colorado, encontraron efectivamente un aumento de riesgo, especialmente en mujeres por debajo de 55 años de edad, en tanto que McDowaII (5) no observaba asociación.
Demers, P. A. y cols. en 1991 (55), en un amplio estudio de casos y controles, observaban un elevado riesgo de cáncer de mama en varones en todos los trabajos con exposición a C.E.M. (OR=1,8. 95% CI= 1-3.7), siendo el riesgo más elevado en electricistas, trabajadores de lineas telefónicas y de radio y de radiocomunicaciones. Se observó que el riesgo era mayor en trabajadores cuya exposición a C.E.M. se iniciaba antes de los 30 años de edad y que llevaban por lo menos 30 años expuestos an~es del diagnóstico. Se deducía una aparente relación entre exposición a C.E.M. en varones y mayor riesgo de cáncer de mama (aunque se señalaban algunos p~ sibíes segos en el estudio), aconsejando una evaluación del problema en mujeres. Jauchen, J. R. en 1992 (63>, aduce posibles «confounding» en el trabajo de Demers, P. A. y col., y remarca la dificultad de precisar los niveles de exposición, aunque esos autores señalan que clasifican esos niveles, según las prof~ siones, en: posibles, probables y definidos.
Tynes, T. y coís. en 1992 (27), en el estudio de una amplia cohorte de trabajadores noruegos de industrias eléctricas expuestos a C.E.M., observaban una razón de incidencia estandarizada elevada, comparando con tasas de incidencia nacional de población masculina activa, para cáncer de mama (ICD-7, 70 revisión, 170; RIS=2,07, Cl 1,07-3,61). Y también los resultados sugerían que la posible asociación entre esas ocupaciones y el riesgo de cáncer de mama era mayor en actividades ligadas al transporte de energía eléctrica, pero con pequeño número de casos que limitaba la validez estadística.

OBSERVACIONES FINALES
Se debe tener precaución en generalizar el resultado de ambientes ocupacionales a medios residenciales.
Se requiere, asimismo, profundizar en estudios de higiene industrial, ya que los carcinógenos químicos pueden actuar como factores interferentes en el estudio de la posible asociación a que nos referimos. También, se requieren más estudios experimentales, así como precisar el efecto biológico específico de campos eléctricos, campos magnéticos y frecuencias e intensidades específicas, así como valorar con precisión la importancia de la duración de la exposición.

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CANCER INFANTIL DE LÍNEAS DE ALTA TENSIÓN

Cáncer Infantil y líneas de alta tensión

Universidad de Oxford, 2005. El British Medical Journal publica en junio de 2005 el estudio “Cáncer Infantil en relación con la distancia a las líneas de alta tensión en Inglaterra y Gales”, elaborado por el Grupo de Investigación de la Universidad de Oxford, dirigido a determinar si existe asociación entre la distancia del lugar de nacimiento-residencia a líneas de alta tensión y la incidencia de leucemia y otros cánceres infantiles. En este estudio utilizaron los registros de 29081 niños con cáncer infantil (National Cancer Registration Infantil) -incluyendo 9700 con leucemia- y un número similar de casos control emparejados por sexo, fecha nacimiento y registro de nacimiento (similar en estas características). El estudio es el que incorpora más sujetos residentes en las proximidades de las líneas de alta tensión y utiliza para medir las distancias a las líneas de alta tensión los datos de las propias compañías eléctricas (National Grid Transco). Los resultados indican que los niños que viven a 200 metros o menos de una línea de alta tensión tienen un riesgo relativo de 1.69 y los nacidos entre 200-600m un riesgo relativo de 1.23, en comparación a los que viven a más de 600 metros. Entre las conclusiones se destaca que de nuevo se constata la asociación entre leucemia infantil y la proximidad de la residencia a las líneas de alta tensión, y que el riesgo parece extenderse a una distancia mayor a la esperable en base a estudios precedentes.

DEFICIENCIA DE HIERRO Y LÍNEAS DE ALTA TENSIÓN

Neuroreport, 20 Marzo 2000

Pseudo deficiencia de hierro y líneas eléctricas e n una población francesa que vive cerca de líneas eléctricas de alto voltaje: Un dilema para los médicos


Traducción de Julio Galindo


21 Marzo 2001 19:21:20 +1100

«Pseudo deficiencia en hierro en una población francesa que vive cerca de líneas eléctricas de alto voltaje: Un dilema para los médicos».

by Eric Hachulla, Marie-Thérèse Caulier-Leleu, Odile Fontaine, Lofti Mehianoui, Paul Pelerin
European Journal of Internal Medicine, Volume (issue): 11 (6) 2000 (pp 351– 352)
La observación durante los años 1993-1994 de una deficiencia no justificada en hierro en una cantidad de pacientes procedentes de una misma población pequeña em el norte de Francia (Coutiches, 50 31′ latitud norte y 3 15′ longitud este, altitud 24-31m: una barriada dormitorio de una gran urbanización vecina) [1] nos llevó a evaluar el perfil y el metabolismo del hierro en personas de esta barriada que viven en las cercanías de las líneas eléctricas de alta tensión.(2x400kV) 50-60 Hz
Para medir los campos electromagnéticos a niveles de 50 Hz. se usaron un Mag check 50+ y un multimedidor matrix MX 52. A 1.50 m sobre la cabeza, los niveles de EMF variaban desde 4.8 uT (48 mG) bajo las líneas hasta 0.2 uT (2 mG) a 100m de ellas.

Un total de 15/31 hombres (48.4%) (P<0.05 comparado con los controles), y 13/34 mujeres (38.2%) tenían bajo el nivel de hierro, pero ninguno tenía anemia. Mientras que ninguno de los sujetos varones tenía bajo nivel de ferritin, 7/34 mujeres (20,6%) sí que apareció. Entre las 13/34 mujeres con bajo nivel de hierro, sólo 3 presentaron bajo nivel del ferritin (15/31 hombres (48.4%) y 10/34 mujeres (29.4%) tenían bajo nivel de hierro pero no anemia y nivel de ferritin normal; P<0.05 comparados con el grupo control, respectively). Estos resultados eran mucho más altos que los observados normalmente en la población general, es decir, la prevalencia de deficiencia de hierro es normalmente menos de un 25% en las mujeres y menos de un 5% en hombres [2-4].

Cuatro residentes varones con los niveles típicos bajos en hierro y normal en ferritin tenían un *myelogram. La distribución de las células era normal y el porcentaje de eritoblastos sin gránulos de hierro era de 56, 68, 73 and 87%, respectivamente. En dos casos, el hierro en macrófagos estuvo ausente.


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La disminución de los niveles de hiero se puede haber debido a la intensidad de los campos electromagnéticos, pero también a la dosis acumulativa y al nmero de horas de exposición al día. También observamos susceptibilidad individual, pues no se observó bajo nivel de hierro en todos los miembros de una misma familia, y en los mismos individuos el nivel de hierro variaba durante este periodo. Esto no sucede sólo con la población de Coutiches. Desde que iniciamos este estudio hemos visto otros casos que viven en las cercanías de líneas de alta tensión (por ejemplo en Bolezeele, otro pueblo del norte de Francia) que en ocasiones han mostrado el mismo perfil de hierro que la población próxima a campos electromagnéticos.

Especulamos que los campos electromagnéticos pueden modificar el metabolismo del hierro en poblaciones sujetas a 0.2 uT (2 mG) o más con una alta tasa de incorporación del hierro en la médula ósea (lo que explicaría el bajo nivel de hierro) y una rápida utilización para el metabolismo de la hemoglobina, a veces con la no-incorporación del Fe59 en el hígado. No hay datos sobre la modificación del metabolismo del hierro en pacientes que viven cerca de campos electromagnéticos. Estos *spurious resultados abogan por un estudio mayor que confirme nuestras observaciones.


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Resumen por Jean-Pierre Lentin < jplentin@club-internet.fr

Coutiches es un pueblo próximo a Lille, en el norte de Francia, situado justo bajo una gran línea de alta tensión (2 x 400 kV). Fue un caso famoso a principios de los 90, con montones de protestas de los vecinos, reportajes en los medios de comunicación, juicios, estudios médicos – todo all to no *avail. Después de que no se tuviera conocimiento de que existiera peligro para la salud, la mayoría de los habitantes se marchó con el tiempo, EDF (Electricite de France, la compañía nacional de electricidad) compró las casas, muchas de las cuales están vacías ahora…

En 1991, se alcanzó un acuerdo con EDF (Electricite de France). EDF financiaría un seguimiento médico periódico sobre 117 residentes, que se harían chequeos y análisis de sangre cada seis meses. Pr Paul Pelerin, del Hospital General de Lille, dirigía el equipo médico.Hallazgos iniciales:Los primeros hallazgos se presentaron a la Asamble Nacional en 1994. Junto a los síntomas relacionados más abajo, se encontró una deficiencia de hierro (ferritinemia) en los análisis de sangre periódicos. (Ahora la nueva investigación, con análisis más precisos y completos, muestra que es una «pseudo-deficiencia»)


Los síntomas manifestados fueron:

  • Cansancio general (fatiga crónica)
  • Dolores de cabeza
  • Insomnio, especialmente en niños.
  • Hipernerviosismo
  • Tensión baja.
  • Deficiencia en hierro (Que ha resultado ser una pseudo deficiencia)
  • 2 casos de ansiedad-depresión graves.
  • Un vecino murió de cáncer de médula ósea en Septiembre de 1992.
  • Náuseas y mareo
  • Problemas de visión y oculares


También se notó que el insomnio desaparecía cuando la electricidad era más baja de lo normal, y volvía cuando la electricidad retomaba su nivel. Los niños con frecuencia no podía dormir en absoluto, por lo que a menudo los mandaban a las casas de los abuelos o de parientes, donde dormían normalmente.

Hallazgos actuales:El Dr. Hachulla en un principio se vio involucrado «por casualidad» en 1994-95. Trabajando en un gran hospital en Lille, notó que varios pacientes que venían para hacerse análisis de sangre presentaban parámetros altamente inusuales, y todos ellos vivían en Coutiches bajo las líneas. Con el tiempo se financió un estudio de seguimiento exhaustivo sobre 15 varones y 13 mujeres, más 31 varones y 34 mujeres control (gente que también viven en Coutiches pero lejos de las líneas de alta tensión). Se hicieron análisis de sangre, mielogramas, exploraciones isotópicas (y por supuesto, mediciones de los campos). Los resultados, a pesar de las variaciones individuales, muestran claramente que la mayoría de las personas que viven bajo la línea presentan una «pseudo deficiencia de hierro», es decir, tienen bajos niveles de hierro en sangre, pero no presentan síntomas de anemia ni descenso de ferritin, que normalmente acompaña a la deficiencia en hierro.

Conclusión : «Especulamos que los campos electromagnéticos pueden modificar el metabolismo del hierro en poblaciones sujetas a 0.2 uT (2 mG) o más con una alta tasa de incorporación del hierro en la médula ósea (lo que explicaría el bajo nivel de hierro) y una rápida utilización para el metabolismo de la hemoglobina, a veces con la no-incorporación del Fe59 en el hígado.»

En el simposium, el Dr. Haculla comentó que este extraño síndrome es desconocido en los registros de medicina, y que uno no sabe en este momento cuáles son las consecuencias sobre la salud y si este efecto puede ser perjudicial o conducir a otros síntomas relacionados con los campos electromagnéticos. Pero parece ser la primera vez que se pone claramente de manifiesto de forma inconfundible un efecto bioquímico objetivo y medible en personas que viven bajo líneas de alta tensión.

En una conversación privada, el Dr. Haculla también me dijo que espera que sus resultados sean duramente criticados por los expertos de EDF… Pero está convencido de que sus datos son muy sólidos y aguantarán las pruebas futuras.

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INFORME CALIFORNIA

Evaluación de Riesgos de los Campos Electromagnéticos de California

California Risk Evaluation Program, 2002. En este año se publica un informe que resume las conclusiones del programa de Investigación sobre Evaluación de Riesgos de los Campos Electromagnéticos de California, promovido por las autoridades administrativas y de salud del Estado de California (“An Evaluation of the Posible Risk from Electric and Magnetic Fields (EMFs) from Power Lines, Internal Wiring, Electrical Occupations, and Appliances” California EMF Risk Evaluation). El informe final efectúa una revisión de las publicaciones científicas sobre los efectos este tipo de radiaciones y doce patologías distintas, estableciendo criterios para definir si existe una relación entre ambas y la certeza de que esa relación sea de tipo causa-efecto. Entre sus conclusiones básicas destaca que la radiación electromagnética es (a) un factor etiológico probable (más de 50% de probabilidades de existencia de relación causa-efecto) para: Leucemia en niños, Cáncer cerebral en adultos, Aborto espontáneo y Esclerosis lateral amiotrófica (enfermedad de Lou Gehring); (b) un factor etiológico posible (10 a 50% de probabilidades de existencia de relación causa-efecto) para: Enfermedad de Alzheimer, Cáncer de mama masculino, Cáncer cerebral en niños, Problemas cardíacos (incluyendo infarto del miocardio) y Suicidio; (c) un factor etiológico posible o probable (desacuerdo entre evaluadores científicos) para: Cáncer de mama femenino y Leucemia en adultos y (d) un factor muy improbable (2 a 10% de probabilidad que exista una relación causa-efecto) para: Alteraciones reproductivas o del desarrollo (excluyendo abortos) y carcinógeno universal.

METAANÁLISIS

En el año 2000 se publicaron dos trabajos especialmente importantes, dado que evalúaban conjuntamente las decenas de estudios efectuados que relacionaban los campos electromagnéticos de extremada baja frecuencia y el riesgo de sufrir leucemia infantil.

Ahlbom y cols. reanalizan datos de 9 estudios anteriores (3203 niños con leucemia y 10338 controles) y Greenland efectúa un metaanálisis con datos de 15 estudios precedentes. Ahlbom constata que los sujetos niños con una exposición media superior a 0.4 microteslas tienen el doble de riesgo relativo de sufrir leucemia infantil. Greenland constata que los sujetos con una exposición media superior a 0.3 tienen un 69% más de riesgo de sufrirla.

(Ahlbom, A., Day, N., Feychting, M., Roman, E., Skinner, J., Dockerty, J., et al. (2000). Apooled analysis of magnetic fields and childhood leukaemia. British Journal of Cancer, 83, 692– 698; Greenland, S., Sheppard, A., Kaune, W., Poole, C., & Kelsh, M. (2000). A pooled analysis of magnetic fields, wire codes,and childhood leukemia. Epidemiology, 11, 624–634-).

TELÉFONOS MÓVILES Y ONDAS CEREBRALES

Los teléfonos móviles provocan alteraciones de las ondas cerebrales

Wolgang Maes

Primeras mediciones del campo de energía con las que poder apreciar el riesgo biológico

La revista alemana «Test Ecológico», en su número 9 de Septiembre de 1994 publicó el primer test realizado sobre los teléfonos móviles.

Hasta ese momento, y a pesar de que se hablaba mucho de los riesgos biológicos, nadie sabía a ciencia cierta a qué distancia habia que contar con ellos, ya que no obstante saber por las investigaciones del Dr. Lebrecht von Klitzing que, a partir de intensidades de campo de 0,1 microwatio/cm2 eran de esperar alteraciones de las ondas cerebrales nadie tenía idea de en qué circunstancias de la vida diaria se alcanzaba esa intensidad de 0,1 microwatio /cm2.

Nuestra empresa Biología de la Construcción Maes y Socio, recibió el encargo de «Test Ecológico» de realizar las mediciones pertinentes y evaluar los riesgos de los teléfonos móviles. Para este cometido contamos con la colaboración de la empresa Hewlett-Packard, que puso a nuestra disposición los más valiosos aparatos de medición, así como al ingeniero André van der Stichelen, acreditado especialista en tecnología de medición de microondas. Las pruebas se realizaron en el laboratorio de la Universidad Técnica de Bochum, en una sala completamente aislada de altas frecuencias y totalmente libre de campos.

La Redactora de «Test Ecolóqico», Reqine Cejka, investigó durante semanas, contactó con muchas universidades, telefoneó a medio mundo y escribió un reportaje, que levantó una gran polvareda y del que aquí ofrecemos un extracto: «se tenían muchas sospechas, pero ahora existe la prueba: El que utiliza el teléfono móvil se contamina a si mismo y al medio ambiente con radiación electromagnética fuerte. Los resultados superan las previsiones más pesimistas.

El Ministro Federal de Comunicaciones (de Alemania) Bösch al parecer ya se barruntaba lo que se le venía encima cuando declaró en una conferencia de prensa: «La acalorada discusión acerca de la energía nuclear es posible que nos parezca una suave brisa, por comparación con lo que va a representar el tema de las redes de telefonía móvil».

Generalmente en los teléfonos móviles, se distingue entre la trasmisión de sonido analógica y la digital. En los teléfonos de trasmisión analógica, las antenas de los teléfonos emiten ondas electromagnéticas de alta frecuencia en las que se encuentra la información hablada. Estas ondas van a parar a una estación fija, que elabora electrónicamente las ondas que recibe y las transmite al receptor. La Red C, que explota la filial de Telekom, Dete-Mobilt funciona por ejemplo por este sistema.

La Trasmisión pulsante es el problema

La transmisión digital se encuentra en las redes D- y E las cuales no son compatibles entre si ni tampoco con la red analógica C. En la red digital D, las señales portadoras de ínformación, se emiten codificadas en series numéricas a la frecuencia de 217 Herzios. Es decir, la conversación es cortada 217 veces por segundo. Y ahí estriba el problema.

El físico-médico, Dr. Lebrecht von Klitzing, de Lübeck, ha comprobado en un experimento realizado con voluntarios, que después de estar sometidos durante 15 a 20 minutos a una radiación de alta frecuencia de 217 Herzios, aparecen unos picos y curvas en el EEG (Electroencefalograma), que hasta ahora ningún médico había observado. Lo sorprendente en el descubrimiento de Klitzing es que estos «Peaks», producidos como reacción del cerebro, seguían manifestándose, aún mucho después de haber desconectado la radiofrecuencia. En algunas de las personas sometidas a la prueba, el científico pudo observar alteraciones de las ondas cerebrales después de transcurridas 24 horas e incluso más.

En cambio, esperimentos similares, realizados con campos no pulsantes, no produjeron ningún efecto.

Desde hace ya más de 15 años hay indicios que apuntan a que los campos pulsantes provocan problemas específicos. Así, por ejemplo, ha quedado demostrado que por el efecto de dichos campos se incrementa la salida de calcio a través de las membranas de las células.

A las preocupantes investigaciones del físico-médico Dr. Lebrecht von Klitzing, hay que añadir la reciente constatación de los físicos de la Clínica Universitaria de Lübeck, según la cual la reacción inmunológica de las celulas sometidas a campos pulsantes o alternos queda reducida en un 90 por ciento. Adicionalmente, en una serie de pruebas con ratas a muy bajas intensidades, se constataron cambios en la actitud de huida y aprendizaje de los animales.

Los científicos de la Clínica Psiquiátrica de la Universidad Gutenberg de Maguncia, Dr. Joaquim Roschke y Dr. Klaus Mann, hicieron una observación muy interesante: Dejaron emitiendo toda una noche un teléfono móvil al lado del sujeto experimental, con el efecto de que las fases REM, es decir, la fase de sueños intensos, se redujeron. Estas fases REM son muy importantes para la elaboración de la información por al cerebro, especialmente en lo referente a nuevas vivencias.

Graves reproches

En un seminario internacional sobre campos pulsantes, celebrado recientemente en Copenague, los dos promotores de la red D-R Telekom y Mannesmann recibieron muchas criticas de sus colegas. En especial los americanos criticaron que en Alemania con estas nuevas redes D- y E- se está protegiendo una tecnologfa que tiene todavía muchos puntos oscuros. Actualmente existen en USA enormes proyectos de investigación para determinar en primer lugar si es que la tecnología de trasmisión digital de la información, sin cable, no ofrece problemas.

Frente a estas reservas, tanto los promotores de las redes como los fabricantes de los aparatos móviles no ofrecen más que declaraciones generales de su inocuidad. Así por ejemplo el portavoz de prensa de Mannesmann Teléfonos Móviles, Christian Smolow, afirmó que «no existía ningún peligro en los teléfonos móviles» pero sin demostrar sus afirmaciones.

También Stefanie Reuter, encargada de prensa de la Red E-Plus, puesta en marcha en primavera de 1994, respondiendo a la pregunta, dijo únicamente que «actualmente todavía no disponemos de pruebas sobre la red E-«

Unas Señoras bofetadas

La revista «Test Ecológico» subsana ahora lo que hasta hoy no han hecho ni los promotores de redes móviles ni los fabricantes. En el laboratorio es casi imposible reproducir todas y cada una de las condiciones de utilización de los teléfonos móviles en la vida diaria, ya que los teléfonos emiten con más o menos potencia, según situación y distancia a la estación fija más próxima.

Por eso, nosotros hemos realizado las pruebas simulando la peor situación posible que se puede dar en la práctica; a saber cuando por ejemplo, la torre emisora está muy alejada o cuando se interpone entre ésta y el teléfono una masa constructiva densa (casa) ó chapa de acero (coche), en cuyo caso el teléfono tiene que emitir a mayor potencia.

Nuestros expertos han medido las intensidades de radiofrecuencia que emiten las antenas de los teléfonos a una distancia de 30 cms. y con estos datos se han calculado las así llamadas «Densidades de energía».

Nuestro test muestra enormes diferencias entre los distintos aparatos: Así, el Nokia 2110 es el que menos contamina, solamente 345 microwatt/cm2 intensidad de campo, mientras que el Panasonic EB-KJ 3810, equivalente al anterior, produce 1693 mikrowatt/cm2 y es el que más contamina. Pero incluso la densidad de energía calculada sobre el Nokia está muy por encima de los valores tolerados en los países del Este: Mientras que la norma DIN alemana autoriza hasta 450 microwatt/cm2, en la antigua Unión Soviética el máximo tolerado es de 1 microwatt/cm2.

Pero aquí hay que tener en cuenta que los valores alemanes se refieren a un valor medio, calculado teóricamente. Nosotros, en cambio con indudable sentido práctico hemos medido, no el valor medio, sino los valores punta realmente existentes. Esto merece una explicación: Las redes digitales emiten radiación pulsante. Esta radiación se compone de una pulsación máxima, el Peak, y de las pausas entre los Peaks. Los valores DIN se basan en el valor promedio de la suma de peaks más pausas, y no en los valores máximos reales, que inciden sobre el cuerpo. Este procedimiento falsea la imagen y, como dice el profesor Gunther Käs de la Escuela Superior del Ejército de Tierra Alemán, en Nuebiberg, «Si tomamos unas señoras bofetadas y les sumamos las pausas intermedias entre bofetada y bofetada y de ello sacamos el valor medio aritmético, entonces se habrán convertido en suaves caricias».

Resultado de las mediciones

Los teléfonos móviles, medidos a 30 cms. de distancia, están diez mil veces por encima de los valores que provocan alteraciones en el EEG, según el Dr. Lebrecht von Klitzingt el cual, al conocer nuestros resultados, manifestó tengo que decir sinceramente que estoy consternado.

La intensidad de campo que se considera problemática por provocar alteraciones del EEG, se detectaba ya a 90 metros en el aparato de AEG Telcar D-902, a 50 metros en los aparatos AT&T 3230 y Panasonic EB-KJ 3810, a 20 metros en otros aparatos, y en todos sin excepción, a los 10 metros.

Nuestros valores se refieren siempre al así llamado campo lejano, que empieza a los 30 cms. de distancia. Por descontado que a nivel de la cabeza los valores medidos se multiplican. El Dr. Rudiger Mathes, de la Oficina Federal Alemana para Protección contra las Radiaciones nos advirtió de que «en ese supuesto se sobrepasaban con toda seguridad los valores máximos DIN». Lo que pasa es que hasta hoy nunca se han medido o, en todo caso, nunca se han publicado las mediciones.

La empresa sueca Allgon contribuyó a que las cosas quedaran así, por lo menos, de momento, ya que esta firma nos suministró la antena medidora para nuestras investigaciones, pero en cambio, se negó a facilitarnos los datos técnicos de la antena, necesarios para calcular las mediciones a distancias inferiores a 30 cms. Sucedió que durante semanas enteras estuvimos pidiéndoles nos facilitaran los datos requeridos, pero ahora está claro que se dieron cuenta de nuestras intenciones y nos fueron dando excusas una y otra vez, hasta que finalmente, poco antes de cerrar la edición, se negaron en redondo a facilitarnos los datos.

Por otro lado, los fabricantes de los teléfonos también intentan enmascarar la problemática, al declarar que ellos no saben nada. El Portavoz de Telekom ante la prensa, Achim Muth, nos comunicó: «En nuestra casa no se realizan tales mediciones; por tanto, no podemos comparar los resultados».

La Asociación para Investigación de Radiofrecuencias, recientemente creada por la Industria, es evidente que tampoco tiene ninguna prisa por llevar a cabo sus objetivos estatutarios, ya que, ni la Asociación ni su gerente Gerd Friedrich reaccionaron a nuestras repetidas peticiones de una entrevista.

En tanto que los promotores de las redes de telefonía móvil, los fabricantes de teléfonos y los Ministerios se afanan con esfuerzo en retrasar el necesario debate critico sobre la telefonía móvil, las companías de seguros alemanas hace tiempo que han reaccionado: Así, por ejemplo, la Companía de Seguros Allianz manifiesta: «Desde 1993 en la industria excluimos la cobertura del riesgo por radiaciones electromagnéticas.»

Como final al reportaje de «Test Ecológico», es de destacar que la falta de investigación en este sector es de, tal magnitud que inspira miedo, y que hay que estar prevenido ante la radiación pulsante.

Extracto de los resultados del Test

(valores en Microwatios/cm2), de los que solamente se han tenido en cuenta aquellos superiores a 0,1 Microwatio/cm2 que según el Dr. von Klitzing son los que influyen en el EEG

Teléfono 0,30 m 1,0 m 30 m 90 m
AEG 9515 856,4 0,95 0,10
AT&T 5110 459,9 0,51 0,05
Panasonic 1693 152,4 0,17 0,02
Ascom 1544 138,9 0,15 0,02
Alcaltel 1315 118,3 0,13 0,01
Bosch 455 40,9 0,04
Hagenuk 443 39,9 0,04  
Telekom 353 31,8 0,03  
Nokia 345 31,1 0,03